TRACTOR

  El tractor nació para substituir en las faenas agrícolas a los animales que solían emplearse en las labores agrícolas, los cuales estaban alcanzando precios prohibitivos. Alimentar un caballo durante un año requería apartar dos hectáreas de cultivo además de una hora por día de cuidado. 

  De modo que la tenencia y empleo en el trabajo de bestias como bueyes, caballos, etc., implicó costos tan encarecedores de la producción, que a comienzos del siglo XX la mecanización dellaboreo de la tierras se convirtió en objetivo prioritario una vez que el hombre perfeccionó los motores. Por supuesto que en los países menos desarrollados alejados de la industrialización y tecnológicamente rezagados, donde el factor costo era menos –así sigue siendo- relevante, la tradición de arar la tierra con animales tardó mucho tiempo más en desaparecer, si es que no persiste debido a factores culturales, económicos y otros.

  El primer tractor reconocible apareció en 1890. Fue precedido, lógicamente, en particular por el motor a tracción. Sin embargo, su peso y su costo impedían que se reemplazara el caballo para varias faenas agrícolas cotidianas. Se utilizaban más generalmente como máquinas estacionarias para arado y trillado, a menudo alquilándose para uso diario.

  El tractor se acercó rápidamente de su diseño óptimo justo después de la Primera Guerra Mundial, cuando el motor y el tren de conducción reemplazaron el chasis. Luego, la innovación consistió únicamente en cambios de detalles asociados con el incremento continuo de tamaño y potencia.